Una amiga me lío a apuntarme en la Sirenas Mediterranean Academy y lo hice aprovechando unos días que pasábamos en Tarragona.
Se trata de una academia donde aprendes a nadar como una sirena. Te ponen una malla o una cola de sirena y esto te obliga a nadar con las piernas juntas.
Yo el primer día me iba directa al fondo del mar. Mientras no aprendes a flotar con las piernas juntas la experiencia es peligrosa. Por eso no la aconsejo para niños de corta edad. Es mejor para mayores.
Una vez que te enseñan a flotar con las piernas juntas dentro de la malla todo se vuelve coser y cantar. Te sientes como un pez. Yo me sentía como una sardinilla. Sirena no me sentía y eso que elegí una de las mallas más bonitas.
No creo que me vuelva a apuntar a la experiencia. Prefiero nadar como nadé toda mi vida. Pero no está mal para probar una experiencia nueva. La monitora nos comentó que esa forma de nadar fortalecía mucho los músculos y mejoraba la respiración. ¿Qué iba decir? Tenía que vender su producto.
A mí la malla me agobiaba un poco. Es un tejido de licra que tiene dibujo de escamas. No me sentía cómoda con las piernas dentro. De hecho tuve que aprender a flotar con las piernas juntas sin malla.
La experiencia de mi amiga fue mejor que la mía. Ella es de las que nada mal y con la malla nadaba mucho mejor. Se ve que nació para sirena.
Lo que es mejorable es la web de Sirenas Mediterranean Academy. Está sólo en catalán. Me parece un error por su parte porque, de estar en español e inglés también, seguro que conseguían muchos más clientes para su academia de sirenas. Ah... también hay sirenos. En el curso que hice yo había un montón de chicos.
Se trata de una academia donde aprendes a nadar como una sirena. Te ponen una malla o una cola de sirena y esto te obliga a nadar con las piernas juntas.
Yo el primer día me iba directa al fondo del mar. Mientras no aprendes a flotar con las piernas juntas la experiencia es peligrosa. Por eso no la aconsejo para niños de corta edad. Es mejor para mayores.
Una vez que te enseñan a flotar con las piernas juntas dentro de la malla todo se vuelve coser y cantar. Te sientes como un pez. Yo me sentía como una sardinilla. Sirena no me sentía y eso que elegí una de las mallas más bonitas.
No creo que me vuelva a apuntar a la experiencia. Prefiero nadar como nadé toda mi vida. Pero no está mal para probar una experiencia nueva. La monitora nos comentó que esa forma de nadar fortalecía mucho los músculos y mejoraba la respiración. ¿Qué iba decir? Tenía que vender su producto.
A mí la malla me agobiaba un poco. Es un tejido de licra que tiene dibujo de escamas. No me sentía cómoda con las piernas dentro. De hecho tuve que aprender a flotar con las piernas juntas sin malla.
La experiencia de mi amiga fue mejor que la mía. Ella es de las que nada mal y con la malla nadaba mucho mejor. Se ve que nació para sirena.
Lo que es mejorable es la web de Sirenas Mediterranean Academy. Está sólo en catalán. Me parece un error por su parte porque, de estar en español e inglés también, seguro que conseguían muchos más clientes para su academia de sirenas. Ah... también hay sirenos. En el curso que hice yo había un montón de chicos.
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