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Nadar mirando el cielo azul es un lujo que te puedes permitir en el NH Valencia Center, un hotel con piscina en la azotea. No importa la época del año. La terraza y la piscina de la azotea están abiertas durante todos los meses del año.
Nosotros nos alojamos en este hotel durante un viaje de negocios de mi marido. Nos dieron una habitación amplia, luminosa, decorada con estilo hotel moderno. Teníamos unas vistas preciosas del jardín botánico de Valencia. Está justo enfrente del hotel.
Mi marido quedó horrorizado cuando vio junto al hotel un centro comercial. Temía que lo dejara pobre fundiendo la tarjeta en tardes de compras. No fue el caso. Sólo me dejé caer por el Centro comercial Nuevo Centro una mañana que no tenía nada mejor que hacer. El resto del tiempo lo pasé teletrabajando, en la sauna del hotel y también fui al gimnasio. Últimamente estoy en una etapa de mente sana y cuerpo sano. Mis propósitos de Año Nuevo todavía se mantienen en pie. Cruzo los dedos.
Lo que más me gustó de este hotel de Valencia es lo bien insonorizadas que tienen las habitaciones. No escuchas los ruidos de las habitaciones vecinas. Por eso es un hotel ideal para la gente que va a Valencia por viaje de negocios o está por motivos laborales. Puedes teletrabajar en tu habitación mucho mejor que en tu casa.
Hablando de teletrabajar he de decir que la conexión wifi es gratis. También te puedes ahorrar dinero en jabones y geles. Los productos de aseo personal que te dejan en el cuarto de baño de la habitación son marca NH. No hay queja de su calidad. Yo los hubiera comprado para llevar para casa si los vendiesen.
Os recomiendo el NH Valencia Center. Tiene muchas ventajas, pero también tiene alguna desventaja. Por ejemplo, el parking no es gratuito. Te hacen un descuento del 20% y gracias. Casi es mejor no tener coche. La estación de metro de Túria te queda a unos diez minutos de caminata. Yo cogía el metro para ir al centro de Valencia. El coche se lo dejaba a mi santo.
Os recomiendo también pedir una habitación para no fumadores. El humo del tabaco queda en todo. Es asquerosillo. Hay que aprovechar que el NH Valencia Center tiene habitaciones para no fumadores.
Nosotros nos alojamos en este hotel durante un viaje de negocios de mi marido. Nos dieron una habitación amplia, luminosa, decorada con estilo hotel moderno. Teníamos unas vistas preciosas del jardín botánico de Valencia. Está justo enfrente del hotel.
Mi marido quedó horrorizado cuando vio junto al hotel un centro comercial. Temía que lo dejara pobre fundiendo la tarjeta en tardes de compras. No fue el caso. Sólo me dejé caer por el Centro comercial Nuevo Centro una mañana que no tenía nada mejor que hacer. El resto del tiempo lo pasé teletrabajando, en la sauna del hotel y también fui al gimnasio. Últimamente estoy en una etapa de mente sana y cuerpo sano. Mis propósitos de Año Nuevo todavía se mantienen en pie. Cruzo los dedos.
Lo que más me gustó de este hotel de Valencia es lo bien insonorizadas que tienen las habitaciones. No escuchas los ruidos de las habitaciones vecinas. Por eso es un hotel ideal para la gente que va a Valencia por viaje de negocios o está por motivos laborales. Puedes teletrabajar en tu habitación mucho mejor que en tu casa.
Hablando de teletrabajar he de decir que la conexión wifi es gratis. También te puedes ahorrar dinero en jabones y geles. Los productos de aseo personal que te dejan en el cuarto de baño de la habitación son marca NH. No hay queja de su calidad. Yo los hubiera comprado para llevar para casa si los vendiesen.
Os recomiendo el NH Valencia Center. Tiene muchas ventajas, pero también tiene alguna desventaja. Por ejemplo, el parking no es gratuito. Te hacen un descuento del 20% y gracias. Casi es mejor no tener coche. La estación de metro de Túria te queda a unos diez minutos de caminata. Yo cogía el metro para ir al centro de Valencia. El coche se lo dejaba a mi santo.
Os recomiendo también pedir una habitación para no fumadores. El humo del tabaco queda en todo. Es asquerosillo. Hay que aprovechar que el NH Valencia Center tiene habitaciones para no fumadores.
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La Masía Ca l'Agustinet, es un hotel rural llamado El Racó dels Àngels. Está muy bien restaurado. Esta masía es del año 1860. Nosotros estuvimos este verano, aprovechando que hacía buen tiempo y se podía usar la piscina. Cuando viene el frío la piscina queda en desuso. No le tienen agua caliente. Una pena. Con agua calentita podría usarse durante todo el año, aunque esté fuera.
De esta masía me encantó el terreno que la rodea. Es un gran campo con 22 hectáreas destinadas desde siempre al cultivo y al ganado. Mis hijas lo pasaron muy bien mirando para los animalitos. Al final nuestra estancia, resultó muy educativa para dos niñas que viven en ciudad. Les pudimos explicar de donde salían los alimentos que compramos en los supermercados.
Esta masía tiene una ubicación perfecta para una familia que busque tranquilidad. Todo es silencio. Situada en el municipio de Vallcebre en pleno Parque Natural del Cadí Moixeró, a 15 Kilómetros del emblemático Pedraforca y a unos 30 minuntos largos de las estaciones de esquí de La Molina-Masella y Port del Comte. No le falta clientela. En invierno, según nos comentaron, todavía tienen más gente. Los esquiadores la suelen elegir como alojamiento.
Por dentro está mejor que por fuera. La restauración no ha quedado en una limpieza de las piedras de las fachadas. La han actualizado para que los huespedes estemos cómodos. Restaurada en 2007, Masia Ca l'Agustinet nos ofreció una estancia especial y confortable, llena de posibilidades de entretenimiento pegado a la naturaleza.
Lo primero que encontramos al entrar es la recepción, la cocina y el comedor. Pasé de la cocina compartida. Yo no había ido para cocinar como en mi casa. Lo quería todo hecho. Por eso eché mano de los platos que tenían a la venta. También compramos bebida, pan recién hecho, postres, etc, etc, etc. Cuanto más comprabas más te ofrecían. Los catalanes son grandes negociantes. El comedor es muy acogedor con sus grandes ventanales. Llama la atención la gran chimenea. La encienden cuando hace frío. Cuando estuvimos nosotros era verano. No tuvieron que encender la chimenea.
Mi marido temía que las niñas se aburrieran. Sus temores se esfumaron cuando, mediante unas amplias escaleras típicas catalanas accedimos a la planta superior, donde había una sala reservada para las actividades, televisión de pantalla plana, juegos, biblioteca y una gran chimenea. Otra más.
Tuvimos la gran suerte de conseguir la suite. Era una pasada. Teníamos una bañera jacuzzi que me dejó nueva. Yo soy de las que me meto en el jacuzzi y me olvido de los problemas del mundo mundial, incluidos los míos. La casona no es grande. Sólo tiene 9 habitaciones más la suite que ocupamos nosotros. Costaba un poco más, pero la merecíamos.
Me gustó mucho que la decoración de las habitaciones fuera distinta. Eran decoraciones con un toque rural sin olvidar la modernidad en las colchas de buenos tejidos y los colchones de buen dormir. La conexión wi fi era buena. Pudimos teletrabajar sin problemas.
Os recomiendo esta casa rural. La Masia Ca l'Agustinet y El Racó dels Àngels Vallcebre, en Barcelona tiene sala de reuniones de empresa y ofrece cursos muy interesantes. Yo participé en un taller de crecimiento personal. Quería hacer algo distinto a las tardes de barbacoa y piscina que proponía mi marido.
De esta masía me encantó el terreno que la rodea. Es un gran campo con 22 hectáreas destinadas desde siempre al cultivo y al ganado. Mis hijas lo pasaron muy bien mirando para los animalitos. Al final nuestra estancia, resultó muy educativa para dos niñas que viven en ciudad. Les pudimos explicar de donde salían los alimentos que compramos en los supermercados.
Esta masía tiene una ubicación perfecta para una familia que busque tranquilidad. Todo es silencio. Situada en el municipio de Vallcebre en pleno Parque Natural del Cadí Moixeró, a 15 Kilómetros del emblemático Pedraforca y a unos 30 minuntos largos de las estaciones de esquí de La Molina-Masella y Port del Comte. No le falta clientela. En invierno, según nos comentaron, todavía tienen más gente. Los esquiadores la suelen elegir como alojamiento.
Por dentro está mejor que por fuera. La restauración no ha quedado en una limpieza de las piedras de las fachadas. La han actualizado para que los huespedes estemos cómodos. Restaurada en 2007, Masia Ca l'Agustinet nos ofreció una estancia especial y confortable, llena de posibilidades de entretenimiento pegado a la naturaleza.
Lo primero que encontramos al entrar es la recepción, la cocina y el comedor. Pasé de la cocina compartida. Yo no había ido para cocinar como en mi casa. Lo quería todo hecho. Por eso eché mano de los platos que tenían a la venta. También compramos bebida, pan recién hecho, postres, etc, etc, etc. Cuanto más comprabas más te ofrecían. Los catalanes son grandes negociantes. El comedor es muy acogedor con sus grandes ventanales. Llama la atención la gran chimenea. La encienden cuando hace frío. Cuando estuvimos nosotros era verano. No tuvieron que encender la chimenea.
Mi marido temía que las niñas se aburrieran. Sus temores se esfumaron cuando, mediante unas amplias escaleras típicas catalanas accedimos a la planta superior, donde había una sala reservada para las actividades, televisión de pantalla plana, juegos, biblioteca y una gran chimenea. Otra más.
Tuvimos la gran suerte de conseguir la suite. Era una pasada. Teníamos una bañera jacuzzi que me dejó nueva. Yo soy de las que me meto en el jacuzzi y me olvido de los problemas del mundo mundial, incluidos los míos. La casona no es grande. Sólo tiene 9 habitaciones más la suite que ocupamos nosotros. Costaba un poco más, pero la merecíamos.
Me gustó mucho que la decoración de las habitaciones fuera distinta. Eran decoraciones con un toque rural sin olvidar la modernidad en las colchas de buenos tejidos y los colchones de buen dormir. La conexión wi fi era buena. Pudimos teletrabajar sin problemas.
Os recomiendo esta casa rural. La Masia Ca l'Agustinet y El Racó dels Àngels Vallcebre, en Barcelona tiene sala de reuniones de empresa y ofrece cursos muy interesantes. Yo participé en un taller de crecimiento personal. Quería hacer algo distinto a las tardes de barbacoa y piscina que proponía mi marido.
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