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Wednesday, May 30, 2018

Mi verano en Murcia


Nos gustó mucho el Hotel Nelva en Murcia, un hotel rodeado por amplios jardines y con unas vistas a la ciudad preciosas. Mis hijas se lo pasaron como nunca subiendo y bajando en los ascensores panorámicos del hotel. La mayor, que tiene algo de fobia a los ascensores, se olvidó de sus miedos mirando por los cristales aquella maravilla que se veía mientras ibas hacia arriba.

La ubicación del hotel es muy buena. Es un hotel tranquilo que te viene bien tanto para unas vacaciones de sol y playa como para un viaje de negocios. Este hotel se encuentra a solo 15 minutos a pie del centro histórico de Murcia. Yo iba con las niñas andando a hacer mis recorridos por las tiendas de marca que tanto me gustan.

Si no quieres salir del hotel mucho, tampoco te aburres. El hotel dispone de una buena piscina que casi te hace olvidar las ganas de playa que llevas. Otra ventaja es la conexión Wi Fi gratuita en todas sus estancias.

La decoración de las habitaciones es idéntica. Como decía mi marido, te metes en la habitación de los vecinos y no te das cuenta. Todas las habitaciones presentan una decoración moderna en tonos blancos e incluyen ducha de hidromasaje en el cuarto de baño y TV vía satélite de pantalla plana a los pies de la cama, una cama grande y cómoda.

Os lo recomiendo. El Hotel Nelva es de los mejores hoteles de Murcia. Es una pena que no abran la cafetería todos los meses. Sólo la abren cuando es verano. No lo entiendo. Lo que sí está abierto durante todo el año es su restaurante, un restaurante que tiene platos regionales muy sabrosos. Nosotros sólo nos quedamos a comer en el restaurante un día. Los otros tres días íbamos a comer a un restaurante del Centro Comercial Las Atalayas que te queda a menos de cinco minutos de caminata del hotel.

Sunday, May 27, 2018

Mis vacaciones más gallegas



Nos alojamos en el Hotel Valencia en Ferrol porque está en la entrada de la ciudad, en la Avenida de Catabois. Pero, como Ferrol es una ciudad pequeña, pudimos ir andando a todos los sitios. El coche quedó aparcado muy cerca del hotel. 

No es un hotel lujoso el Hotel Valencia. Habitaciones sencillas, fachada más sencilla, estancias igual de minimalistas. Es un hotel cómodo, pero sin tener la decoración de hotel de negocios ni caer en una decoración de casa familiar. Más bien recuerda la decoración sencilla de los pisos de estudiantes. 

Nosotros pedimos una habitación para no fumadores cuando nos dijeron en recepción que tenían unas cuantas habitaciones reservadas para las personas que odiamos el tabaco. Era una habitación espaciosa, limpia, sencilla, con una colcha blanca a la que daban vida unos cojines rojos. El cuarto de baño también era un canto a la sencillez y a la limpieza. Nos sentimos cómodos. Hacía calor, pero se estaba bien dentro gracias al buen funcionamiento del aire acondicionado. 

Lo único que lamenté fue no tener una conexión wi fi gratis en la habitación. Sólo está disponible en las zonas comunes. Me arreglé en un salón común sin mucha gente. Me hubiera gustado más haberme podido conectar a la red de redes en mi habitación. 

Lo que sí me pareció una gran ventaja fue que no admitieran mascotas. Detesto alojarme en habitaciones por las que ha pasado algún perro o algún gato. Por mucho que las limpien huelen a animales de compañía de cuatro patas. Sólo por eso ya os recomiendo este hotel sencillo de la bonita ciudad de Ferrol. Deberían mejorar la fachada. El hotel ganaría mucho con una fachada con más clase. También ganaría más si tuviera un parking privado. Pagar casi seis euros por día y encima tener que reservar es como para pensarlo. Mi marido lo pensó tanto que acabó dejando el coche fuera.

Saturday, May 19, 2018

Mis vacaciones en familia



Lo pasamos muy bien en el Hotel del Golf Playa porque está justo delante de la playa Pinar de Castellón. Es un hotel perfecto para unas vacaciones de sol y playa con niños. Además, este hotel tiene una guardería para dejarlos mientras tú vas a la playa tranquilamente o te vas de tiendas. 

También está muy bien para los maridos a los que les gusta el golf, como a mi santo. Este hotel está frente al campo de golf de Costa Azahar. Mi marido se lo pasó de cine jugando al deporte de los palos con sus amigos. Yo me dediqué al turismo de sol y playa aprovechando que el hotel dispone de una piscina exterior y tiene la playa allí mismo. También tiene el hotel una terraza donde puedes tomar un refresco bien frío mientras miras lo feliz que es la gente cuando no trabaja. La conexión Wi-Fi gratuita me vino de cine para mi ocio y mis trabajos a través de la Red de Redes. 

Todas las habitaciones eran parecidas. Nosotros nos quedamos con la que nos dieron. Las habitaciones del Hotel del Golf Playa son luminosas y amplias, con espacio suficiente para que no te sientas como una sardina enlatada con el resto de la familia que llevas. Se está bien en la habitación gracias a que cuenta con aire acondicionado. Todas las ahbitaciones tiene un balcón, perfecto para tomar el sol sin salir de tu cuarto, cosa que cada vez más hago. Nuestra habitación tenía vistas a la piscina. Desde la terraza veía a mis niñas nadando como sirenitas en la gran piscina del hotel. 

El cuarto de baño era muy sencillo. Tenía una ducha como la de las habitaciones de los hospitales, con banqueta para sentarte. Yo quité la banqueta. Me ducho siempre de pie. 

Nos quedamos a desayunar, comer y a cenar en el hotel. Era lo más cómodo estando con las niñas. El Hotel Golf tiene un restaurante bufé y un bar-cafetería con unos precios algo elevados. Lo que no tuve que pagar porque me entraba en el precio fue el variado programa de animación, así como un parque infantil. Sí pagamos un extra por un campo de minigolf en el que mi marido presumió de saber jugar al deporte de los palos y las pelotas.

Sunday, May 06, 2018

Mis vacaciones más ardientes



1

Lo que más le gustó a mis hijas de Praga es la estatua ecuestre de Venceslao. Es el símbolo de la patria checa. No entendí qué le vieron. Las llevamos a ver una estatua que la parodia en las galerías art Mouveau del palacio de Lucerna y siguieron diciendo que les gustaba la estatua original. La parodia tiene el caballo muerto. Se lo colgaron del techo con las patas hacia arriba. Esto hacía reír a los turistas. Mis hijas lo encontraron de mal gusto. Ellas querían a Venceslao con su caballo vivo. 

La parodia de la estatua ecuestre de Vendeslao es de un tal David CernÝ. Un hombre que se ha hecho famoso en su país con una parodia de mal gusto. tienen razón mis hijas: un caballo representado muerto no es nada bonito. 

Nuestro viaje a Praga fue bastante cultural. Llevamos a las niñas al Museo Dox, dimos un paseo por el animado barrio de Zizkov y paseamos por otras calles de la ciudad llenas de edificios de agujas góticas. 

Praga es una ciudad bonita a su manera. El Castillo de Praga es el castillo más grande del mundo. Hay que verlo. Mirando su fachada, te das cuenta de la grandeza que se dieron siempre los dirigentes de los países, fueran reyes o no fueran reyes. En este castillo vivieron reyes y todo tipo de gobernantes. Cuando empezaron a ser republicanos no renunciaron a los lujos. 

Mi marido se quedó con ganas de hacer la ruta de la cerveza en la parte vieja de Praga. No se lo permití porque es padre de familia. Uno empieza con una cerveza y acaba con veinte cantando el Asturias Patria querida. Sería horrible. 

Tampoco quise entrar en la Catedral de San Vito. Tenía suficiente con verla por fuera. La fachada era muy de catedral. Praga tiene una parte moderna más desconocida e interesante. No es una ciudad sólo de iglesias, catedrales y castillos. Lo que sí parece por todos sus lados es una ciudad de un cuento de hadas en el que infinitas y mágicas torres acogen a guapas princesas muy deseadas por sus príncipes. Las calles parecen creadas para el simple disfrute de los turistas y las tiendas están decoradas con el mayor detalle para que te sientas cómoda comprando. El marcado ambiente medieval que envuelve la ciudad la hace única. Por eso os recomiendo visitarla.



2

Dos días fueron los que pasamos la semana pasada en Lisboa con las niñas. Lisboa es una ciudad que nos gusta a todos y solemos ir con cierta frecuencia aunque sólo sea para hacer unos viajes por la capital del país vecino en sus famosos tranvías. Prefiero un viaje en el tranvía nº 38 que una cena romántica en un restaurante lisboeta, pero, si pueden ser las dos cosas, mejor que mejor. 

Poco puedes hacer en dos días. Nosotros fuimos los cuatro hasta el Castillo de San Jorge, dimos un paseo por la Lisboa más pueblerina. Subimos al mirador de Santa Justa. Mi marido se empeñó en ir a tomar unas cervezas a la cervecería Trinidade, una cervecería con una cerveza exquisita. Aunque no te guste la cerveza, la de la cervecería Trinidade seguro que te parece deliciosa. Es lo que me pasa a mí. También me gusta mucho el local de la cervecería, un local lleno de azulejos que no te deja indiferente. 

En Lisboa no debes perderte la Praza do comercio. Hay unos restaurantes con mucho ambiente. Tampoco debes perderte el Monumento a los Descubridores. Pero lo mejor, como os he dicho, son los tranvías. 

Os recomiendo visitar Lisboa. Los tranvías son Lisboa, son uno de los mejores medios de transporte para conocer Lisboa. Tienes que visitar los barrios humildes, el puerto, la zona alta. Quedan cinco líneas de tranvía en Lisboa. Hubo unas treinta a principios del siglo XX, cuando el tranvía estaba de moda en muchas ciudades. En Lisboa el tranvía tiene su razón de ser porque es una ciudad con muchas cuestas. El metro no llega a todas partes de la ciudad. Lisboa es una ciudad medieval, con calles enrevesadas. La gente se ha cansado de conducir en una ciudad con poso sitio para dejar el coche y vuelven a fijarse en el tranvía como medio de transporte.



3

Me llamó la atención que Alzira conserve parte de su muralla antigua. De hecho, hasta no hace tantos años, en la Villa de Alzira, el barrio antiguo de la ciudad había una muralla. No sé como la gente no tenía claustrofobia con tanta muralla. Yo prefiero aguantar a los piratas a tener que vivir en un sitio con dificultades para salir y para entrar. 

En todo caso, hoy no hay piratas en Alzira sino muchos turistas, demasiados para mi gusto. En temporada alta parece que estás en una ciudad en fiesta continua. El verano pasado mi marido nos llevó al Parque Natural de la Murta para escapar un poco del mundanal ruido que había en las playas de los alrededores. Pudimos respirar un poco de aire puro en una tarde en la que las niñas lo pasaron mejor que yo. Acabamos la visita al parque con una visita al Monasterio de la Murta. Un sitio tan triste como una monja. Casi me vino la depresión mirando la fachada del monasterio. 

Hay muchos edificios antiguos en Alzira. El mismo ayuntamiento de la ciudad, es un edificio que data del lejano siglo XVI. Se nota que es una ciudad con mucha presencia eclesial en el pasado. Fuimos paseando hasta las Escuelas Pías. Ahora es la Casa de la Cultura, pero se nota que anduvieron por allí los curas. El edificio tiene un aire muy eclesial. 

Os recomiendo visitar Alzira. Si te apartas del monasterio, de las escuelas Pías y de las iglesias lo pasas bien. Eso es lo que no me gusta de Alzira: su pasado clerical reflejado en muchos monumentos. Tiene otros sitios para visitar. Por ejemplo La Casa Museo de la Magia. Mis hijas lo pasaron de cine allí dentro. Si vas a Alzira, puedes dedicar la mañana a caminar por las calles del casco antiguo, finalizando la visita en la Plaza de la Constitución o en la Plaza Cassasús; y por la tarde, continuas andando hasta las Murallas del Viejo Mercado en el Parque de Arabia Saudita y seguir la caminata hasta la Plaza Mayor. También es recomendable visitar el Museo Municipal de Alzira. Nosotros no nos fuimos de Alzira sin acercarnos a la costa en Cullera. La playa es un placer que no me prohivo.

Tuesday, May 01, 2018

Mis vacaciones senderistas



1

Uno de los mejores hoteles que hay en Alcobendas es el Amura Alcobendas, un hotel con spa y centro de bienestar. No me lo creía cuando me alojé con mi esposo. Mi santo iba a una reunión de negocios que se celebraba en este hotel y lo acompañé. Yo también hacía negocios esos días por la zona. Tenía unas clases que les daba a las consultoras de mi empresa. 

Pues bien, quedé encantada con los servicios recibidos en este hotel que tiene conexión wi fi gratuita en todas sus estancias. La conexión wi fi de nuestra habitación funcionaba de maravilla. Nos dieron una habitación amplia con decoración muy de hotel y dos camas inmensas. No había diferencia entre la cama de matrimonio y la cama auxiliar que ocuparon mis dos niñas. La habitación estaba muy limpia. 

Lo mismo pudo decir del cuarto de baño. Era un cuarto de baño con una buena ducha, una pileta lo suficientemente amplia como para compartir en un lavado de dientes familiar. Las toallas te las cambiaban todos los días, igual que las sábanas de las camas. 

El desayuno se nos hizo escaso. De fruta había unas rodajas de sandía que se comió mi hija mayor sola. la bollería que me tocaba a mí se la di a la otra niña. Mi santo y servidora acabamos desayunando de nuevo en una cafetería de los alrededores. 

Pese a esta desventaja del desayuno escaso, os recomiendo el Hotel Amura Alcobendas. Es un hotel que está limpio, es moderno y tiene un personal amable. Del spa y del centro de belleza ni os hablo. El spa es fantástico. Mi marido no vino porque estaba muy ocupado con sus negocios. Se perdió lo mejor del hotel. 

Para desplazarte hasta Madrid ciudad no tienes problemas. A 500 metros de la puerta de este hotel está la parada de metro Moraleja, que ofrece conexión directa con el centro de la ciudad, con la estación de Chamartín y con el estadio Santiago Bernabéu. Yo aproveché para ir en metro a mis tiendas favoritas.



2

Si quieres hacer una ruta senderista de alto riesgo, puedes hace la Vía verde Plazaola que hice con mi marido y prometo no repetir la experiencia. Mi santo me dijo que sólo había que ir bien abrigados y llevar unas linternas. Cuando vi aquellos caminos por dentro de unos túneles de tren, me vinieron ganas de pedir el divorcio. 

La Vía verde Plazaola transcurre por las vías del ferrocarril minero que unía San Sebastián y Pamplona. Con el paso del tiempo, los hierros de las vías fueron desapareciendo. Las autoridades competentes aprovecharon el viejo trazado de la vía del tren para atraer turistas con una vía verde. 

La peor parte de esta ruta son los túneles. Yo pasé más miedo que en una película de miedo. Era horrible. Tenías que ir por con las linternas iluminando el suelo y lo que te rodeaba. Temí que nos pareciera un lobo o un bicho parecido haciendo estragos en nuestras existencias. 

Nos cruzamos con un grupo de jóvenes que hacían la ruta en bicicleta. Tanto tiene ir andando como en bicicleta. Yo casi prefiero ir andando. Ir en bicicleta es muy cansado porque hay que pedalear como una condenada. 

Lo mejor de la Vía verde Plazaola es un pequeño museo con la historia del ferrocarril que pasó por aquellos parajes silvestres. En el museo hay un espacio destinado a los más pequeños de la casa. Nosotros íbamos sin las niñas. Nunca hubiera llevado a mis hijas por un camino con túneles sin iluminar. Se me hubieran muerto de miedo. Mis hijas son muy sensibles. 

No os recomiendo hacer esta ruta, a no ser que te gusten las experiencias fuertes en una naturaleza asilvastrada, con paisajes donde avistas animales salvajes. Nosotros vimos unos zorros. No se veían agresivos. parecía que se acababan de dar una comilona de gallinas por los gallineros de las casas de los ganaderos que quedan en estos valles que serán un verdadero santuario natural, pero a mí no me gustaron

Prueba primero, paga después