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Thursday, September 14, 2006

Una gorda en mis pantalones

 Ayer fui a la modista a recoger los trajes para el reportaje de la revista "Miss" sobre moda otoño-invierno. Me encontré con una clienta que intentaba meter en mis pantalones a una chica sobrada de kilos que protestaba como si la mataran. ¿Por qué la gente se empeñará en ser lo que no es? Si eres delgada perfecto y si eres gorda estupendo también.
 
 La señora empezó a gritar como una manifestante en la puerta de Alcalá. Quería saber quien era la "anoréxica" que había encargado una talla 34 para todo su ropero.
 
 La modista intentaba calmarla diciéndole que era la ropa de una niña del equipo de gimnasia rítmica, pero la individua lejos de calmarse ampliaba el repertorio de insultos que me alcanzaban a mi cuando reparaba en mi presencia.
 
 La hija luchaba con una falda de cuadros atascada en sus piernas cebadas a hamburguesas del Burger King.
 
 Saque mi moleskine y le escribí la dirección de la revista a la modista. Allí tenía que entregar la ropa en buen estado. La modista me prometió traérmela mañana una vez reparados los desperfectos causados por la gruesa moza.
 
 Pero aún no habían acabado mis problemas. La mujer gritona me agarró por el brazo diciendo que me llevaba a comisaría por ser una modelo anoréxica. Me liberé de sus garras como pude y la dejé con sus gritos de histérica, con su hija gorda y con la modista que me ha perdido de clienta.



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1 comment:

Sophia Miss said...

"¿Por qué nadie comenta mi blog?" Me suena como si le preguntas a un pobre ¿por qué eres pobre?... No hay mayor desprecio que la compasión. No es el caso. Este blog se ha abierto para escribir lo que a mi me de la real gana, no para recibir aplausos ardientes de lectores extasiados. Los comentarios se suelen acumular en blogs de autores mediocres que buscan la admiración de esta sociedad ridícula.

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